No
es común reunir 800 intelectuales y personalidades del mundo en un mismo
espacio. Mucho menos Medellín había tenido la posibilidad de congregar nombres
de la envergadura de los expresidentes Luiz Inácio Lula da Silva, de Brasil, y
José ‘Pepe’ Mujica, de Uruguay, además de los reconocidos académicos Boaventura
de Souza Santos, Suzy Castor, Juan Carlos Monedero, Jesús Martín-Barbero,
Aníbal Quijano, Aldo Ferrer, Baltasar Garzón y Eugenio Raúl Zaffaroni.
Sucederá
durante la conferencia Latinoamericana y Caribeña de Ciencias Sociales, que
después de realizarse en Río de Janeiro, Brasil (2006), Cochabamba, Bolivia
(2009) y México (2012), inicia en la capital antioqueña hoy y se extiende hasta
el jueves próximo en Plaza Mayor.
El
certamen académico, que es organizado por el Consejo Latinoamericano de
Ciencias Sociales, Clacso, es considerado la reunión más importante del mundo
en temas como educación, políticas de juventud, modelos de desarrollo, procesos
políticos, pobreza y desigualdad, migración y géneros.
A
la par con la agenda académica, de la que hacen parte 30 conferencias
magistrales y 260 paneles, en Medellín se realizará la XXV Asamblea General de
Clacso, en la que los invitados deliberarán sobre pobreza y educación, entre
otras problemáticas propias de la región.
En
el cierre de la sesión de la Asamblea, del que hará parte el expresidente Lula
da Silva, las directivas de la organización emitirán un pronunciamiento y
entregarán sus visiones y recomendaciones sobre el proceso de paz que vive
Colombia.
Esa,
precisamente, será una de las discusiones que se espera lideren expertos como
Eugenio Raúl Zaffaroni, juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y
ex juez de la Suprema Corte de Justicia (Argentina), y el también exjuez y
especializado en Derechos Humanos, Baltasar Garzón.
Recién
anunciado el evento, hace un año, en la Casa Museo de la Memoria de Medellín,
Pablo Gentili, secretario ejecutivo de Clacso, explicó que habrá más de 200
mesas redondas alrededor de un tema fundamental para Colombia y América Latina,
como es la construcción de procesos de paz duraderos, la construcción de
democracia y de justicia social.
“Creo
que este es, sin lugar a dudas, un tema central para el presente y el futuro de
Colombia, que desde toda América Latina acompañamos con mucha atención”,
aseveró Gentili.
Orgullosos
al ser anfitriones
Suena
reiterativo que la presencia de certámenes internacionales en Medellín tenga
como motivación de los organizadores la transformación positiva de la ciudad y
el estatus que se ha ganado a nivel internacional como una de las más
innovadoras del mundo, pero con la conferencia y Asamblea de Clacso volvió a
suceder.
Los
países miembros, 25 con 432 centros de estudios afiliados a la organización
(ver gráfico) ponderaron la superación que en la capital de Antioquia se ha
hecho a fenómenos tan marcados de violencia como los generados por el
narcotráfico.
Para
Juan Diego Barajas, secretario de Educación de Medellín, este es un
reconocimiento más que se les hace a las transformaciones sociales que se han
venido dando en Medellín y que son referente nacional e internacional en
materia de justicia social, equidad y participación democrática.
“Este
es un evento que nos llena de orgullo acogerlo”, anotó.
Dentro
del itinerario de los invitados internacionales en la ciudad también hay
incluidas conferencias en el Museo Casa de la Memoria y en el Centro de
Desarrollo Social de Moravia.
Así
mismo, no se descarta que algunos intelectuales realicen visitas a los lugares
que son símbolo de esa transformación de Medellín.
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