Así lo decreto este domingo la autoridad,
pues el aire aún es nocivo para grupos sensibles.
Foto:
Archivo / EL TIEMPO
Este
fenómeno es diferente a las condiciones del pasado mes de marzo, que llevaron a
una alerta roja por la contaminación del aire.
Para este lunes se mantendrá la alerta
naranja por la calidad del aire en el valle de Aburrá, según informó Área
Metropolitana, autoridad ambiental de la región.
Si bien durante este domingo hubo remoción de
contaminantes del valle de Aburrá, "el evento de precipitación de la tarde
nuevamente estabilizó de manera temprana la atmósfera, impidiendo una
dispersión más eficiente de contaminantes", informó la autoridad
ambiental.
Por tal razón, las concentraciones de
material particulado PM 2.5 permanecen por encima del umbral de Índice de
Calidad del Aire (ICA) Naranja, clasificado como peligroso para ancianos,
niños, mujeres en embarazo y personas con enfermedades respiratorias.
Durante las últimas 24 horas, tres de las
cinco estaciones de monitoreo del aire consideradas como de representatividad
poblacional mantuvieron un ICA naranja y las tres restantes están en amarillo
(moderado).
Se espera que en el transcurso de la Semana
Santa ocurra una disminución considerable de las concentraciones de PM 2.5
debido a las condiciones climáticas pronosticadas y, sobre todo, a la
tradicional disminución del tráfico vehicular, que es de entre el 40 y 60 por
ciento de los vehículos particulares que circulan por el valle de Aburrá.
Foto:
Reporte del Siata.
Imagen
tomada la mañana de este lunes del reporte del Siata.
Esta esa quinta alerta naranja consecutiva
que se ha declarado este mes en el valle de Aburrá. La primera se dio el pasado
jueves, producto de un fenómeno llamado subsidencia, en el que la capa
superficial de aire se contrae, haciendo que el aire contaminado (que debería
salir del valle por ascenso vertical) se concentre cerca de la base de la
cuenca topográfica.
Hace dos semanas el valle de Aburrá vivió su
primera alerta roja del año, entre el 22 y el 27 de marzo, lo que obligó a
tomar medidas restrictivas de circulación de vehículos.
Sin embargo, según informó la autoridad
ambiental, el fenómeno actual no estaría relacionado con el de marzo, agravado
principalmente por la transición entre la temporada seca a la lluviosa.
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